lunes, 25 de febrero de 2019

Los caballitos de tela



Los caballitos de juguete están entre los mas antiguos juguetes usados por los niños en la historia. Comenzaron a hacerse muy populares en la Edad Media, en el siglo XV europeo en donde los caballeros se movilizaban en caballos reales. Se hacían en tallas de madera y algunos tenían la cabeza de tela rellena, que se unía al resto del cuerpo. También en esa época se hacen populares los llamados caballitos de palo, que consistían en una barra de madera que los niños colocaban entre sus piernas y cabalgaban en sus juegos. Pero este juguete existe desde tiempos mas antiguos como la época romana, de la que se conservan algunos ejemplares tallados en piedra.
El caballito de trapo quizás surge con la muñeca de trapo, o tal vez algo mas tarde, en América, durante la época colonial, evolucionando desde entonces,aunque conservando su orígenes tradicionales.
En mi historia como juguetero tengo ya cuatro años haciendo caballitos de tela, tres modelos diferentes en cada producción. La primera vez hice una serie de 9 caballitos realizados en una sola pieza cada uno, decorados con cuentas de cristales, canutillos, mostacilla,  habían 2 pegasos y un unicornio, en el conjunto, estos los hice para la temporada de navidad, vendiéndolos todos, excepto el unicornio el cual conservo en mi colección. Al año y al siguiente, realice una nueva serie, mas numerosa, y con un nuevo diseño en el que prevalecía la racionalización de los materiales para bajar los costos, aunque preservando la gracia del juguete. Hice una abstracción de la forma, llevándolo de cuatro patas a dos,y haciéndolo auto-portante, colocando tapas plásticas de botellas en la parte de los cascos para que pudiesen pararse. La nueva producción de este cuarto año varia de nuevo el diseño, articulándolos en cinco partes, el cuerpo y las cuatro extremidades, logrando una pieza mas versátil e interesante.  









sábado, 15 de septiembre de 2018

DE COMO ZOBEYDA LA CIMARRONA SE CONVIRTIÓ EN MUÑECA DE TRAPO



"Esta era una vez una niña llamada Zobeyda, que de tanto amar las cosas sencillas de la vida se convirtió en una muñeca de trapo.

Los duendes traviesos la encantaron desde que nació. Al principio se le aparecían en forma de distintos animales: garzas del estero que se la llevaban lejos en sus patas zancudas, toninas como personas que la hacían llorar con ellas, caimanes juguetones que la correteaban en las orillas de los caños. Fue así como la enamoraron de Venezuela, la patria en que había nacido: de su naturaleza ensoñada y sus paisajes que parecen de embuste.

De chiquita fue pulpera. Entre mercancías, clientes, ñapas, lochas y corotos, la enseñaron los duendes a despacharle amor al prójimo, y la prendaron de sus paisanos, gente de tierra caliente, que son como Dios los hizo.

Después empezaron los muy traviesos a aparecérsele transformados en niños, que son los mejores profesores del mundo. Y tanto aprendió Zobeyda de los niños, que ya de grande se hizo maestra. Y para que siempre viviera rodeada de sus queridos niños, y no dejara de ser nunca uno de ellos, los duendes continuaron encantándola convertidos en lo que más aman los niños: los juguetes.
La maestra Zobeyda llenó su salón de juegos, canciones, cuentos y poesías. Todos los niños de su escuela querían estar allí. Como los juguetes no alcanzaban para tantos, la maestra Zobeyda, las mamas y los papas de los niños empezaron a hacerles muñecas de trapo, que son los juguetes más sencillos de la tierra.

Tanto jugaban, que mientras a las otras maestras les parecía que Zobeyda estaba loca, a los duendes les pareció chiquito el espacio del salón y poco el tiempo de las clases, así que, junto con los niños, seguían a Zobeyda después de la escuela hasta la casa donde ella vivía, en el pueblo portugueseño de Píritu, para que el juego no parara nunca.

Fue asi como se llenó de muñecas, y de historias y juegos de muñecas, la casa y la historia de Zobeyda. Una señora le dio en adopción a la muñeca Eusebia, para que siempre la acompañara. Un poeta de su tierra la canonizó como “Santa Zobeyda de las muñecas de trapo”, y un duende falconiano, musiquero y cantor, la bautizo en el nombre de Cimarrón, que es el dios de las plantas silvestres, los animales libres, las piedras inatrapables, las muñecas hechas sin molde y las personas felices.

Duendes de otras partes de Venezuela, y de otros países, empezaron a encantarla hacia sus lugares, porque sospechaban que con ella viajarían muñecas, cuentos, poemas, cantos, dibujos y, lo que más le gusta a los duendes: las musas, que según Zobeyda son mentiras en forma de verdades y verdades en forma de mentiras. Y así fue como se hizo andariega, y empezó a llevar por todo el mundo su equipaje cimarrón de trapitos, colores, palabras, canciones, rimas y embustes.

Una tarde volvió de uno de sus viajes y se encontró con que su casa ya no era la misma. Duendes campesinos le habían construido otra morada. Esta era grandota y de barro, y tenia en el medio un jardín con luceros que por el dia descansaban transformados en paraparas, trinitarias cuyas flores se vuelven mariposas, y tareas escolares ya hechas, que juegan a la ronda mientras esperan que algún niño venga a copiarlas en su cuaderno.

Muñecas de cada uno de los sitios donde había estado Zobeyda la andariega se encontraban allí. Niños y adultos de toda Venezuela disfrutaban cada detalle de la nueva casa como quien tiene la suerte de volver a soñar un sueño hermoso del que nos han despertado antes de tiempo. Y todos los duendes piriteños jugaban por los alrededores, en un bosque lleno de pájaros prestidigitadores, matas como sirenas y flores ensimismadas.

Llevando de la mano a su muñeca compañera, Zobeyda salió esa tarde a recorrer el bosque. A medida que se acercaban a donde comenzaban  los árboles, fue sintiéndose tan liviana como Eusebia, y le pareció que el tiempo se iba enlenteciendo cada vez mas, hasta detenerse –como en los juegos de los alumnos- . una niña que venía caminando hacia la casa las encontró dormidas, recostadas de una inmensa piedra. Las subió a su regazo y las llevó hasta el lugar de donde habían salido. Era la Casa de la Muñecas de Trapo del pueblo portugueseño de Píritu, en los llanos de Venezuela.”


Enrique Rojas
Licenciado en Letras
Prof. Universitario

Zobeya Jimenez "La Cimarrona Muñequera piriteña" , patrimonio cultural de Venezuela, nace en Píritu, estado Portuguesa el 2 de julio de 1942, y muere el 2 de julio de 1912 cuando cumplía 70 años, su corazón fue la puerta de su liberación.

CREADORA, POETA y especialmente MUÑEQUERA

DECLARACIÓN DE LAS MUÑECAS DE TRAPO
(Homenaje a Aquiles Nazoa, esrito por Zobeyda la muñequera cimarrona)

Nosotras las Muñecas de Trapo
declaramos:
Que somos hechas de trapos viejos, de tiras, de recuerdos.
Que nacemos por amor y con amor
de las manos de la gente sencilla.
Que los niños y los poetas son cosas aparte con nosotras,
se vuelven locos cuando nos ven.
Que cuando el tiempo ha pasado nos evoca la gente
y nos encuentran acurrucadas en los recuerdos de su niñez.
Que caminamos por el pueblo, nos mantenemos en él,
y estamos presentes en su imaginación y en su realidad.
Que valientemente enfrentamos la existencia
luchando por todas las cosas hermosas
y sencillas que la componen.
Que somos felices donde hay amor, paz y poesía.
Acordamos:
Solidarizarnos con las muñecas cabezas´e ñema,
las cabeza´e bombillo, las de tusa, las de barro, las de palo,
las de piedra, las de guásimo, las de junco, las de cera.
Que los niños, jóvenes y viejos
jueguen con nosotras.
Identificar el amor entre la gente
y decir NO a la guerra.
Hacerle un reconocimiento público
a los niños y a los poetas.
Ayudar a la conservación de la tradición
de la Muñeca de Trapo.
Reunirnos algún día con todos los Muñequeros
y Muñequeras para la celebración
de la postura de agua de Muñecas.
Seguir fantaseando porque es un derecho humano.
Enviar copia de la presente declaración a los que nos aman.
Dado, firmado y besado en Píritu, Portuguesa, Venezuela,
al amanecer de cualquier día
en la Casa de una Muñequera del pueblo.
Las Muñecas de Trapo.

miércoles, 1 de agosto de 2018

12 MUÑEQUEROS



En este video aparecen 12 creadores de muñecas, 4 venezolanos y 6 extranjeros, 12  perspectivas en el mundo de la muñeca, abarcando lo contemporáneo y lo tradicional, las técnicas del siglo 21 y las técnicas ancestrales aplicadas a la contemporaneidad. Todos hacedores de muñecas hechas a mano.
Primero se vera la creación del artista australiano, RON MUECK, que no precisamente es un muñequero sino un escultor, pero que por la obra que presenta, se ha seleccionado para abrir el video, luego aparecen los franceses,  JULIEN MARTINEZ, muñequero y artista plástico y BENJAMIN LACOMBE, dibujante y creador de historietas. Los dos han trabajado juntos en algunos momentos cuando Benjamin requiere dar forma tridimensional a algunos de sus personajes como Blanca Nieves, Alicia, o Frida. Seguidamente, el trabajo del ruso MIHAIL ZAIKOV, artista de muñecas de apariencia muy realista, luego JOSHUA MCKENNEY, norteamericano creador de la muñeca Pidgin, lanzada en 2012. Hasta el momento estos 5 creadores utilizan las nuevas tecnologías en el mundo de la muñeca, las resinas, los polímeros, el sistema bjd. A continuación el ruso DENIS SHMATOV, este creador se encuentra en la frontera de la técnica contemporánea y la técnica ancestral de la muñeca de trapo, haciendo un híbrido de las dos. Continúa  el ucraniano VALERIY BONDARENKO presentando una muñeca de fuerte personalidad y expresión plástica, realizada con técnicas tradicionales de su región, con partes tallada en madera y cuerpos de tela rellenos. Para cerrar la participación extranjera tenemos a MISTER FINCH, artista autodidacta de Inglaterra, trabaja exclusivamente con la tradicional técnica de la muñeca de trapo, pero no presenta la muñeca de figura humana sino figuras de animales o vegetales. Entran los venezolanos, todos 4 trabajando la técnica tradicional de la muñeca de trapo, empezando con HENDRIK HIDALGO, artista plástico, de basta producción creativa, pintura, performance, instalaciones, tiene un aparte en el ámbito de la muñequería, como expresión de lo sagrado. A continuación EVELIO RODRIGUEZ, su proceso creativo a evolucionado radicalmente llevándolo desde la figuración histórica y tradicional hasta una expresión mas moderna y contemporánea. Aparece ALEJANDRO BAUTISTA, experimenta como muñequero desde el año 2011 a partir de un cuadro expuesto en su segunda individual en el MAVET, en su investigación creativa y personal, busca evolucionar la muñeca de trapo tradicional adaptándola a una figuración mas contemporánea. Y para terminar veremos un extracto de la  obra del maestro ARMANDO REVERON a manera de homenaje a su memoria.
Todas las imágenes que aparecen en el video fueron descargadas de internet de sitios públicos.











RON MUECK



                                                         


















BENJAMIN LACOMBE
JULIEN MARTINEZ
















JOSHUA MCKENNEY
MIHAIL ZAIKOV







DENIS SHMATOV
MISTER FINCH




HENDRIK HIDALGO
                                    
                                                 VALERY BONDARENKO



ALEJANDRO BAUTISTA

EVELIO RODRIGUEZ


ARMANDO REVERON



miércoles, 4 de julio de 2018

LAS MUÑECAS DE AYMARA




Aymara con su muñeca italiana Athena 1961



Un 7 de febrero de 1961 nació Aymara en San Cristóbal, ciudad venezolana. Yo ya había cumplido un año y 7 meses, era su hermano mayor y un mundo de vivencias compartidas nos esperaba, y entre muchas cosas, las muñecas que llegaban a ella, especialmente las que mi padre le traía de sus viajes a Caracas, han guardado en su existencial misterio de muñecas, las esencias de dos niños que se hicieron adultos junto a ellas.

Fantasías, sueños, proyecciones psicológicas, son parte del destino de una muñeca, dando forma al secreto que ellas guardaran por siempre mientras sigan siendo acariciadas por el aire del planeta.

Así estas muñecas, podrían ser libros de cuentos infantiles o de historias psicológicas, como también, registros codificados de un momento de la humanidad, reflejando, gustos, tendencias, conocimientos adquiridos, técnicas constructivas, e igualmente, el momento evolutivo de la industria del juguete en determinado tiempo.

Un 29 de marzo del año 2000, Aymara fue llamada a trascender la encarnación que conocí de ella,  en el proceso de transfiguración  de la luz que conforma el Universo, para renacer quizás, en una estrella, en una flor o tal vez en un ser angelical que ilumina esta Tierra.

En un último momento fui encargado por ella, de cuidar sus queridas muñecas, y aquí están, refrescadas, conservadas, muy amadas, queriendo compartir su misterio, su belleza, con aquellos que las busquen , las encuentren, y aprecien todo lo que pudiesen leer en ellas, a través de los ojos de la mente, dando plenitud a un alma sedienta.

Athena, Riba, Silvia, Carolina, Barbie, son los nombres que les dieron sus creadores, destacando los italianos de la casa Furga y los norteamericanos de la casa Mattel, pero hay alemanes, japoneses, chinos, y cada uno con un concepto distinto aunque todos con el mismo fin: crear una muñeca, un estímulo para la imaginación, un compañero para el corazón.

Por ahora están aquí, en este blog, para el encuentro con todo aquel que las halle, pero buscan un lugar que las hospede por mucho tiempo, para el encuentro físico, para compartir el aire que se respire, para vivenciar las emociones que se generen, con esta generación y con futuras generaciones, un Museo del juguete, un Museo de la muñeca, ese es el sueño de estas muñecas, de las muñecas de Aymara.
























Aymara con nuestra madre.  Ella misma era como una muñeca, con sus ojos grandes y expresivos, y un corte de pelo que mi madre decía, era corte muñeca.

7 años después nació Ana María, llegando a compartir las muñecas de Aymara y acrecentando el número de ellas. Alli vemos a Silvia, muñeca de la casa Furga.

















En la década de los 90 nace Giovanna, hija de Ana Maria, quien juega también con las muñecas de Aymara; en esta imagen con Athena, la primera muñeca de Aymara. 



Giovanna, hija de Ana María, jugando con Athena






Athena y Reba son muñecas de celuloide, fabricadas en Italia en la década de los años 50. 





Athena y Reba muñecas de los años 50, como se conservan actualmente en 2018





En 1961 en brazos de la tía Consuelo, compañeros de juegos Aymara y Alejandro.



Aymara y Alejandro con David, hijo de Alejandro, sobrino de Aymara, 1989



Hacia 1965 se crearon en Italia unas muñecas con un nuevo concepto L’ALTA MODA, de la casa Furga, fabricadas en vinilo de alta calidad con los ojos insertados y largas pestañas negras características de la casa. De ellas, Aymara tenia a Silvia, que era una de cuatro muñecas que pertenecía a la serie "S", llamada así porque tenían nombre que empezaba con S, Sheila (pelirroja), Susana (de cabello negro), Simona (de pelo castaño  con pollina o flequillo) y Silvia (rubia).

La serie "S"de Furga 1965




Silvia muñeca de Furga 1965, restaurada en 2018, que perteneció a Aymara



























Carolinas y Faustina también son de la casa Furga de Italia





















Metti de la casa española Ibenca y Barbie de la norteamericana Mattel

Aymara también experimento el arte de hacer muñecas de trapo, y fui sorprendido por mi hermana Ana Maria, en este diciembre reciente, al revelarme que parte de esas muñecas las ha tenido guardadas desde hace mucho tiempo. Aqui les muestro parte de las que ella hizo en ese momento... 

























Y aquí están reunidas, casi todas, las muñecas que fueron confidentes de una niña que creció junto a ellas, pero que tubo que partir quizás muy pronto, no sin antes acordarse de dejarlas en custodia a quien sabia, las cuidaría y las querría quizás tanto como ella. 







De los rostros mas expresivos





















1962 con papá


































Con su hijo Ángel Alejandro 
año 1998










A tu memoria querida hermana, por siempre...